Tilete, cuando un ciudadano toma la firme decisión de denunciar a la Administración Pública ( esto es, un ayuntamiento, una comunidad autonoma, un ministerio, etc), debe de hacerlo ante una clase de tribunales llamados "Contenciosos-Administrativos", y a través del "recurso contencioso administrativo"
El recurso puede interponerse contra:
-La inactividad de la Administración
-Los actos que se dicten aplicando disposiciones cuando se alegue que estas disposiciones no son conformes a derecho, esto es, no son legales.
¿ Quienes pueden recurrir ? Entre otros:
Las personas físicas o jurídicas que tengan un derecho o un interés legítimo.
Las corporaciones, asociaciones, sindicatos, grupos y entidades que por ley se les autorice para ello. En este caso, representaran los intereses de los colectivos en cuyo nombre actuan.
En principio, las partes deben intervenir en el procedimiento contencioso-administrativo obligatoriamente asistidos por un abagado, siendo opcional la representación mediante procurador.
Sin embargo, si el recurso es tramitado ante un órgano colegiado o tribunal ( Salas de lo contencioso-administrativo de los tribunales superiores de justicia, de la Audiencia Nacional y del Tribunal Supremo), las partes deberan contar obligatoriamente tanto con un procurador como co un abogado.
Lo suyo sería, ir en comandita para que los gastos de costas pudieran ser asumibles, además, sería lo justo, ya que cualquier fallo que se gane de forma individual marca jurisprudencia beneficiandose el resto.
No pongo en duda que de forma lúdica se pueda hacer barrio, pero la lucha mancomunada por nuestros intereses comunes deberian ser la premisa con la deberiamos partir para dotar de propia identidad al Pau de la Montaña.
Es tiempo de reivindicaciones para que seamos un verdadero barrrio. El barrio se muere porque muchos propietarios no ven una realidad a corto plazo el proyecto inicial que se nos vendió y donde la queja enmudecida es nuestro único consuelo. Levantemos la voz y reclamemos lo que en justicia nos pertenece. Si, hagamos barrio, pero desde el respeto y no el favor de nuestros gobernantes.
Acomodemos la casa y después hagamos las fiestas, chocolatadas y castillos hinchables que queramos, seguro, que luciran mejor.
Perdón por la extensión, pero no puedo comprimirlo.
Un saludo.