Planteado de esta manera parece todo muy sencillo. Estoy totalmente de acuerdo con lo que dices, pero no es tan sencillo llevarlo a la práctica. En situaciones como la que acabas de explicar las cosas se pueden torcer mucho.
La educación es algo muy subjetivo, lo que a tí te puede parecer bien a otro le puede parecer horroroso. Por ejemplo, el caso que expuse, no se si en este post o en otro parecido, de los niños que juegan al baloncesto con las papeleras. A los padres a lo mejor no les parece mal que lo hagan, es posible que piensen "mientras que no les dé por machacar a la papelera no le va a pasar nada", pero también es posible que quien lo vea piense todo lo contrario ¿qué se hace en esos casos?, pues depende de la tolerancia hacia ciertos actos de cada persona, y el no ser tolerantecon algo no le convierte ni en un cafre ni en un antisocial. Pues para eso se han establecido una serie de normas, que aunque en algunos casos parezca que están más a favor de unos que de otros, tienen su razón de ser y han sido ratificadas por la mayoría.
Lo que pasa algunas veces es que cuando pensamos que tenemos razón no somos capaces de ver el otro punto de vista y es cuando empiezan los gritos y las malas formas. Imaginate que al niño que le dijiste que no saltase se le mete entre ceja y ceja que tiene que saltar, y vas y lo agarras (sin fuerza) para que no lo haga, como te vea el padre ya la tenemos liada.
Por último, y para dejar de divagar (que ya termina mi descanso de 10 minutos), las normas están aceptadas pero al menos yo las entiendo como provisionales, es decir, que podremos cambiarlas, aunque siempre pasando por una junta de vecinos.
Un saludo,
Angulo, volviendo a mis andadas