Estoy contigo, es una verguenza como está el parque infantil, lleno de colillas, y claro los peques por allí jugando y cogiendo todo lo que ven. Yo también fumo, pero me preocupo de tirar las colillas a la papelera, eso si, una vez bien apagadas. Además de colillas, vengo observando que también hay latas o brick de zumos, bolitas de papel de aluminio, vaya que la gente baja merendar y de paso a dejar todo como una pocilga. Es que no les enseñaron de pequeños que la basura hay que tirarla a la papelera, aunque sea el precinto del paquete de tabaco. Así ¿cómo esperamos que los niños aprendan, sino ven el ejemplo en sus mayores?
Por cierto, me entristece ver que sobre este asunto no haya habido repercusión, ni una sola respuesta a nuestro vecino blasito.
Un saludo