En la avenida Rio Mandeo, uno de los ejes principales de la red viaria de nuestra urbanización, nos encontramos con la presencia de solo dos pasos de cebras, al principio y al final de la avenida, con una distancia entre ellos de 400 metros.
Los peatones, con más riesgo sobre todo los padres que lleven carritos con bebe, se ven muchas veces costringidos a cruzar la avenida en puntos donde no hay paso de peatones, para no hacer la circunvalación de toda la avenida, que sumando el viaje ida y vuelta puede llegar al kilómetro, solo para cruzar una calle!!!
Además siendo una avenida con doble carril por sentido, y con trazado rectilíneo, los conductores recorren este vial con más velocidad, agrandando los riesgos para los peatones que cruzan la calle.
Si detectar y exigir asuntos tan sencillos resulta difícil, ya no se entiende a que se dedican los miembros de nuestra Delegación del Ayuntamiento (perdón, la Entidad).
Señores, hay ya todas las condiciones para que nuestra Delegación del Ayuntamiento (perdón, Entidad) sea intervenida por Bruselas, ya que nuestro spread de calidad de vida, viaja sobre valores insostenibles.