Pues quitad inmediatamente los papeles y revisad los cristales.
A nosotros nos han endiñado uno roto. Como hemos quitado los papeles hasta que hemos puesto las persianas, no lo hemos visto. La respuesta del constructor: te fastidias, que han pasado más de cuatro meses.
Adicionalmente, el instalador de las persianas ya nos ha avisado que esas roturas se deben a las diferencias de temperatura, y a que los tornillos de los marcos chocan directamente contra el cristal, con lo que puede que en verano tengamos más grietas.