Hola,
No sé si habéis tenido la oportunidad de leer este artículo sobre ARganda..
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ABC
Martes 20 de Julio de 2004
Una nueva «versión» de la M-30 circundará el casco urbano para mejorar el tráfico.
Cuando el nuevo Gobierno municipal, con Ginés López a la cabeza, hizo público su programa político en las elecciones del pasado año, prometió una mayor fluidez del tráfico. Una ciudad de este tipo no podía verse frenada por los problemas de accesos y comunicaciones, sobre todo, si se tiene en cuenta el movimiento que este municipio genera. Y los argandeños apostaron por Ginés López. Quizás, porque en 1999 consiguió que el Metro se detuviera en su ciudad. Las cuentas del Consistorio tienen una importante partida destinada a la mejora del transporte y las comunicaciones. En ese sentido, los Presupuestos Generales de 2004 prevén una inversión de 1.812.652 euros para la remodelación de la carretera de Loeches y 1.286.824 euros para la creación de la ambiciosa circunvalación AR-30. Además, la Radial 3, de pago, servirá también para aliviar la siempre cargada A-3.
Problemas de acceso
Madrid es el punto neurálgico de toda la región. Aunque muchos ciudadanos han optado por vivir en distintos municipios, la referencia sigue siendo la capital por cuestiones de trabajo, burocracia y ocio. Las cifras de la gran urbe hablan de más de 400.000 vehículos que entran y salen a diario de ella. Si a esto se le unen los nuevos desarrollos urbanísticos, aún sin terminar, el problema crece por momentos.
Por eso, la preocupación y la urgencia del alcalde. La línea 9 de Metro, con dos paradas en la ciudad, fue ya una gran solución. Pero no suficiente. Los horarios, la lejanía de las estaciones, la nocturnidad hacen que se siga usando la carretera.
La gran apuesta del Consistorio para el quinquenio 2003-2007 es la construcción de la circunvalación AR-30, similar a la M-30 que circunda la almendra central madrileña. Según el proyecto, la nueva vía rodeará todo el casco urbano y lo conectará con el polígono industrial, con nuevos accesos desde la AR-30 al casco urbano por la calle Real, El Grillero, barrio de El Mirador, colonia de los Almendros, carretera de Morata, La Perlita, Valdelarcipreste, polígono industrial —a través de El Valle—, avenida del Ejército y enlaza con la rotonda actual de entrada a Arganda, plaza del Progreso y entrada a Gran Hábitat. Paralelamente, se va a remodelar la carretera de Loeches, desde su inicio en la plaza de la Bienvenida hasta el paseo de la Estación y la calle del Doctor Escribano Ortiz. Además, se saneará el paseo de la Misericordia.
El trabajo del Ayuntamiento se ha notado también en las conexiones internas de Arganda. En octubre se pusieron en funcionamiento dos nuevas infraestructuras que han supuesto una gran descongestión para el tráfico que se dirige hacia las zonas norte y oeste del municipio. Se trata de una semiglorieta que recupera la salida directa hacia Madrid desde la avenida del Ejército. La otra gran solución ha sido la construcción de una rotonda en la avenida de Valdearganda, en su cruce con la carretera de Campo Real.
El Ayuntamiento quiso demostrar a su llegada al Gobierno que quería trabajar, buscar soluciones reales. Y lo hizo en un tiempo récord. Las obras de construcción de la rotonda de salida directa a Madrid por el polígono industrial se acometieron en sólo 19 días, antes de la fecha prevista. Las actuaciones se llevaron a cabo en horarios especiales para no entorpecer la circulación. «Los ciudadanos beneficiados son muchos —aseguran en el Ayuntamiento—, ya que quienes pretendían salir de Arganda tenían que dar la vuelta en la plaza del Progreso».
El otro nudo abierto es la rotonda en la avenida de Valdearganda, que conecta el municipio con la carretera comarcal de Campo Real. Además del beneficio que supone para sus vecinos, esta vía evitará el tráfico pesado de la actual carretera de Loeches, que atraviesa el barrio de Villares, un tramo muy castigado por el paso de camiones procedentes del Corredor del Henares.
La llegada de la Radial-3
El pasado 16 de febrero, el ex presidente del Gobierno José María Aznar, con la presencia del alcalde de Arganda, inauguraba la polémica Radial-3. Polémica por ser una vía de pago, lo que ha levantado las críticas de los ciudadanos. De pago, sí, pero necesaria, según el Ayuntamiento, tanto para quienes sólo van de paso, como para los propios ciudadanos que necesiten usar su coche. Ésa es, al menos, la opinión del Consistorio argandeño.
La nuevas radiales, criticadas en un principio por su precio, han empezado a funcionar. Despacio, pero sin pausa. Según sus defensores, lo que se paga en peaje lo ahorras en gasolina y en nervios. Ese ahorro puede suponer un tiempo de 45 minutos en hora punta y 2 euros en combustible. Ésa es la gran apuesta de la R-3 para intentar convencer a los más de 100.000 conductores que entran cada día por la carretera de Valencia. Mide 33,9 kilómetros y une Arganda con la autovía de circunvalación M-40. El peaje cuesta 2.85 euros. El presupuesto ha sido de 318.000 millones de euros.
El objetivo municipal es que esta vía de pago llegue a absorber el 35 por ciento de los vehículos que a diario circulan por la A-3 y se considera una vía fundamental para conectar con el futuro aeropuerto de Campo Real, en caso de que el proyecto culmine.
Además de jugar con distintos precios, los propietarios de la radial han adoptado un dispositivo Vía-T, un aparato que se coloca en el salpicadero y funciona como una tarjeta de crédito, lo que permite pasar por los peajes sin detener el coche. La calidad y seguridad de su firme es otro de los argumentos de sus gestores. En este acto inaugural, el alcalde no se olvidó de un grupo de agricultores que aún no habían percibido sus indemnizaciones por la expropiación de sus terrenos.
Los nuevos barrios
«En el equipo de Gobierno estamos desarrollando un plan integral del servicio de transportes, con el que tenemos previsto aumentar tanto el número de los autobuses como las líneas que ya existen», explican sus responsables. El objetivo principal: los nuevos barrios residenciales de Arganda.
Así, la Concejalía de Transporte está perfilando un nuevo diseño para dar servicio a toda la ciudad de Arganda, que se expande sin límites y que, de aquí a ocho años, podría estar habitada por 80.000 personas. Ante estas perspectivas no queda más remedio que hacer un nuevo diseño de transporte público para llegar a todas estas nuevas construcciones. Y todo, sin olvidar las conexiones con otros municipios para facilitar el traslado de los vecinos de otras localidades hasta el futuro Palacio de Justicia argandeño o a su Hospital del Sureste. Llegado el momento, no se descarta la necesidad de abrir vías ligeras o lanzaderas que comuniquen de una manera rápida las distintas localidades.
Según el Ayuntamiento, hay dos variables sobre las que se está trabajando. Por un lado, hay que ampliar el número de autobuses que llega a estos nuevos barrios y, por otro, se hace necesario diseñar nuevas líneas que den cobertura a la totalidad del municipio. En principio, este Plan Director contempla un servicio más racional en los nuevos barrios de El Grillero —zona circundante al conservatorio Montserrat Caballé— ; la ampliación de los Villares a ambas márgenes de la avenida de Alcalá, o el barrio de La Castaña, situado en la carretera de Morata.
Fue en 1983 cuando se aprobó la creación del Servicio Municipal de Transporte Público para dar asistencia a zonas alejadas del casco urbano, como el barrio de La Poveda, la residencia de ancianos, la zona industrial o los centros de enseñanza. Así nació esa primera línea de carácter circular, hoy privada, que se ha ido ampliando en función de las necesidades. Aunque la reforma está aprobada, los nuevos autobuses no estarán listos hasta pasado un tiempo, ya que se necesitan, al menos, entre seis y ocho meses, porque son necesarios unos trámites para poder rodar.
Los próceres municipales, con ideas nuevas en la cabeza, han trabajado también en el desdoblamiento de la A-3 entre Madrid y Arganda, en la mejora de las transversales M-300 y M-313 y en la adecuación de la antigua carretera nacional a su paso por el polígono industrial, actual avenida de Madrid.
La Concejalía de Transportes tampoco puede olvidar la mejora de los estacionamientos. Así, está prevista la construcción de nuevas plazas públicas, tanto para residentes como en rotación, además de la construcción de aparcamientos obligatorios en los barrios de nueva creación.