Ayer estuvimos en el piso hasta las 10 de la noche y ni cuando llegamos ni cuando nos fuimos vimos conserje alguno. Tenemos luz de obra pero no tenemos en los pisos agua, lo cual es una faena.
Aquello por el momento está bastante "desértico".
Los que ya habéis podido entrar en el piso felicidades, y a los que todavía no os ha tocado mucho ánimo. Lo cierto es que al final la espera vale la pena porque la ilusión con la que entras en la casa es ENORRRRRME.
Besos a todos