Edificios emblemáticos por dentro

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¿Cuántas veces ha pasado delante de un edificio singular y se ha preguntado quién vivirá ahí? ¿Quién vive en un edificio como Torres Blancas, levantado por un arquitecto de prestigio mundial y convertido en uno de los símbolos de Madrid? ¿Quién vive en Casa Milá, Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO y un símbolo en Barcelona?

Los turistas hacen cola diariamente para entrar en ellos, les hacen fotos, pero no acceden más allá de las zonas comunes. Comando Actualidad ha conseguido que los privilegiados que viven en estos edificios emblemáticos abran las puertas de sus casas para enseñarnos lo que nunca se ve.

Les va a sorprender descubrir cómo es el interior de las viviendas de Torres Blancas, y comprobar que los tres únicos vecinos de Casa Milá son de renta antigua. Carmen paga 1.200 euros al mes por una vivienda de 7 habitaciones y cuatro cuartos de baño en uno de los edificios catalanes más famosos del mundo.

Como lo es el casco histórico de Toledo. Visitado diariamente por cientos de turistas que patean sus calles estrechas parándose a fotografiar cada detalle. ¿Cómo conviven con ellos los vecinos que viven junto a la catedral o en esas mismas calles empedradas? ¿Imaginan cómo debe ser vivir en casas construidas hace quinientos años?

Frente al pasado, el futuro que ideó Ricardo Bofill: el Walden 7. Es uno de los bloques de viviendas más grandes del mundo: mil vecinos tan identificados con su edificio que han creado una especie de pequeño país. Se hacen llamar "waldenitas" y los hay tan apasionados que hasta lo llevan plasmado en su tarjeta bancaria.

Pero hay vecinos de edificios singulares que no se sienten tan orgullosos de vivir en esos inmuebles diseñados por arquitectos famosos y fotografiados a todas horas. En los nuevos barrios de Madrid existen los "naranjitos, los pitufos, los cuéntame". Y no se llaman así con orgullo, al contrario, creen que vivir en edificios de diseño moderno, ya sea con colores o de bambú, les convierte en ciudadanos de segunda, les marca porque son de protección oficial frente a los edificios privados que también conviven en esos nuevos barrios y cuyo diseño es más tradicional.