Efectivamente, una vez aprobado hay que asumirlo, es lo que la mayoría desea, y se supone que es lo que se desea lo mejor para la comunidad. No está bien la palabra prohibido, tendría que haber sido no admitido a personas no familiares de propietarios.
La ley que regula el derecho de admisión y en general todo lo relacionado con establecimientos públicos y actividades recreativas se elabora a nivel autonómico, debido a que las comunidades autónomas tienen competencia exclusiva en este ámbito.