Hola a todos, pese a ser un tanto inoportuno unos días antes de poder ver POR FIN los pisos, me ha parecido interesante compartir una reflexión que he encontrado hoy en internet referente a la compra de vivienda y la "desgravación por adquisición de vivienda" a partir de 2013 que ha suprimido el gobierno: ¿Artículo orientaivo, fidedigno, publicitario, inútil, especulativo, paranoico......?
La desgravación por adquisición de vivienda ha sido uno de los verdaderos males de la economía española. Este dinero acaba directamente en el bolsillo de los vendedores ya que los compradores cuentan con un dinero extra que se les es posteriormente devuelto. Como el vendedor era consciente de esta realidad, aumentaban el precio de la casa en cuestión en esa misma medida. De esta forma se producía una inflación totalmente artificial.
Se llevaba el ahorro de la economía a financiar actividades de muy baja productividad en vez de fomentar otras. Si se hubieran concedido ese tipo de ayudas a la industria, a la investigación y si se hubieran orientado los ahorros del país a crecer mediante aumentos de la productividad, otro gallo nos habría cantado.
La retirada de la maldita desgravación es un alivio enorme para el mercado inmobiliario al hacer que los precios de las casas bajen aún más. Al carecer de apoyos fiscales, el dinero disponible para la compra de vivienda será menor con lo que la demanda de pisos se contraerá y su precio también.
La única salida para el mercado inmobiliario es la bajada masiva de los precios de los pisos. Dar a entender que el problema del mismo es la financiación es la falacia sistemática del sector desde que no pudieron esconder la bajada de los precios de los pisos que ya comienzos a mediados de 2006. Decir que la financiación es el problema es decir que a tipos de interés cero el capital que se puede prestar es infinito, o lo que es lo mismo, que el valor de las casas en cuestión es ilimitado. Mantener este fraude significaba en la práctica poder vender los pisos a precios disparatados.
Lo que el Gobierno ha de hacer, es aumentar el IVA en la venta de nuevos pisos del 4% al 8% y eliminar de una tacada la exención de impuestos por ganancias de capital por aumento del precio de la vivienda en el momento de sus venta tal y como había hecho a principios de este año. Estos elementos son una clara inducción al error por cuanto que suponen hacer pensar a la población que los precios de los piso subirán en los próximos años…nada más lejos de la realidad.
Desde mediados de 2006 hasta finales del mes de junio de 2012, los precios de venta real de los pisos ya han bajado el 45% (un 51% en términos reales).
A lo largo de este período de adaptación de los precios de las viviendas a la realidad, los precios bajarán un rango del 65-85% en términos reales estando la media en el 75-80%. Ya solo en 2012 y 2013 y respecto a los precios a 31 de diciembre del año anterior, los mismos sufrirán una corrección del 15-20% al año. La única salida de la encrucijada del mercado inmobiliario, y también de la economía española es la deflación masiva, algo que ya lleva sucediendo desde hace varios años.
El número de ventas de pisos ha descendido el 75% desde pico: sólo la bajada de los precios animará el mercado, nada más. Financiación ni hay, ni la habrá.
Los números son tozudos:
• Al menos 1,9 millones de pisos de primera y de segunda mano a la venta;
• 1,3 millones de pisos en construcción;
• Al menos 2,6 millones de pisos vacíos en zonas de primera residencia;
• Demanda anual de pisos de 175 mil unidades máximo;
• El 38% menos de población el rango de 10 a 24 años que de 25 a 38
A todo esto hay que sumar una tasa de desempleo que llegará al 27,5% este año y una contracción de la actividad económica resultante del aumento de los impuestos porque el Estado se ha negado a cortar sus privilegios.
Para que quede claro, la bajada de los precios de los pisos ya ha sido desde mediados de 2006 del 52% en Barcelona, el 29% en Bilbao, el 46% en Madrid, 39% en Málaga, 34% en Sevilla, 48% en Valencia y el 48% en Zaragoza…por lo menos. A todos estos números hay que sumar la depreciación por la inflación del período.
Si los vendedores quieren vender, lo tienen muy fácil: que bajen los precios. Aquellos pisos cuyo precio parece ser un chollo hoy, serán considerados muy caros mañana, es cuestión de tiempo. Cuanto más se tarde en vender una casa a menor precio se enajenará.
Hay gente que se echará mañana a la calle a toda prisa pensando “Si no compro ahora, me quedo sin la desgravación, así que a comprar”. ¡Qué decisión tan mal informada! El ahorro resultante de la desgravación será en la apabullante mayoría de los casos mucho menor que la bajada del precio del piso en cuestión; de esta forma se producirá una fuerte pérdida patrimonial, un empobrecimiento.
Se mire por donde se mire, comprarse un piso ahora es una salvajada, hasta 2016-2017 pisos, ni tocar. La mejor forma de ahorrar en entorno deflacionista es esperar.
*Borja Mateo es autor de los libros “Cómo sobrevivir al crack inmobiliario” y “La verdad sobre el mercado inmobiliario español” (editorial Manuscritos) borjamateo.com