División entre los alcaldes de los municipios del Norte de Toledo afectados por el convenio sanitario con Madrid, después de que el presidente regional, Emiliano García-Page, haya anunciado -y fuentes de Sanidad lo hayan confirmado a este diario- que va a estudiar romper el acuerdo en tanto que considera que éste potencia la sanidad privada y que los centros de Parla y Aranjuez, que son los que prestan servicio para los vecinos de Toledo, no cuentan con la calidad de que dispone en sus servicios el Hospital Virgen de la Salud, el de referencia para estas localidades de La Sagra y La Mesa de Ocaña.
Mientras que los regidores socialistas avalan la propuesta de Page al considerar que este convenio fue electoralista, amén de favorecer la sanidad privada, los del PP entienden que es una «traición» a los vecinos del Norte de la provincia. Los alcaldes de IU, por su parte, igualmente se muestran favorables a romper el convenio, siempre y cuando se potencien y mejoren los servicios que se dan en Toledo.
La Junta no está en contra de cómo se está haciendo la gestión del convenio en la parte que afecta a Guadalajara, porque los vecinos son enviados a centros públicos, pero se niega a colaborar con un modelo de gestión donde la empresa privada tiene más peso, como ocurre con los hospitales a los que son derivados los afectados por el convenio en la provincia toledana.
PSOE
El alcalde de Noblejas, Agustín Jiménez, a cuyos vecinos les corresponde el Hospital de Aranjuez, tiene claro que no está a favor del convenio en tanto que supone una pérdida de la calidad asistencial, al considerar el centro madrileño de «tercera división, pudiendo ir a uno, como es el de Toledo, que es de primera». En este sentido, apunta que sólo valdría acudir a ese Hospital para una emergencia de «tercer grado. Para una emergencia habitual, yo les recomiendo a los vecinos que vayan a Toledo».
El de Illescas, José Manuel Tofiño, no sólo no es que se muestre en contra del convenio sino que agradece a Page «que más pronto que tarde haya tomado esta decisión, porque el PP lo que intentó con el convenio es aprovechar que había elecciones».
Sin embargo, Tofiño matizó que lo que tendría que hacer la Junta es potenciar el Centro de Especialidades de su localidad, devolviéndolo al estado de antes de que llegara el PP a Castilla-La Mancha, que ha dejado un «bodrio» que sigue siendo el centro de referencia para la comarca.
Partido Popular
Como era de esperar, los alcaldes del PP opinan justo lo contrario que los del PSOE. Así, al de Yepes, Antonio Rodríguez-Tembleco, le parece «fatal» que se pueda romper el acuerdo y así privar a los vecinos de la posibilidad de acudir a hospitales que están a apenas unos kilómetros de sus términos municipales, caso de lo que ocurre con Yepes y Aranjuez. Sin menospreciar la labor de los profesionales del Sescam, el edil yepero entiende esta propuesta de Page como un «sinsentido» y que sólo responde a motivos políticos, ya que fue el PP quien lo puso en marcha. «Page ha metido la gamba», subrayó.
Más duro fue el diputado regional y alcalde de Seseña, Carlos Velázquez, quien incluso llegó a hablar de «traición» a los vecinos del Norte de Toledo. Destacó que este acuerdo «ha costado mucho trabajo» y que era una respuesta a la demanda de cerca de 100.000 vecinos de las comarcas afectadas. Finiquitarlo supone «constatar el abandono a una zona de la que sólo se han acordado para hacer lo que no debían, como el crecimiento urbanístico». «Si esto responde a su frase de reparar el daño causado, no podría empezar peor», agregó.
Remedios Gordo, desde Ocaña, considera que esta posible medida de Page es «un paso atrás» con respecto al avance que había supuesto la firma del convenio, recordando que los vecinos no están obligados a ir a Madrid sino que se trata simplemente de un «derecho» con el que ahora podrían dejar de contar. En resumen, para la edil ocañense, acabar con el acuerdo es algo «fuera de toda lógica».
Izquierda Unida
En Izquierda Unida también hay consonancia entre los alcaldes afectados en relación con la posibilidad de romper el convenio con Madrid. Tanto el de Santa Cruz de la Zarza como la de Esquivias se muestran favorables a no seguir con él al entender que no apuesta por un modelo público.
Tomás Lorenzo, regidor de Santa Cruz, reconoció que «teníamos muchas pegas con este convenio, muchas dudas», puesto que, aseguró, si bien los vecinos recibieron la carta de la Junta, en ésta se explicaban pocas cuestiones acerca del contenido del convenio alcanzado con la comunidad vecina. «Todo lo que sea mejorar la sanidad nos parece estupendo, pero lo que sea fomentar la sanidad privada, no nos gusta». En todo caso, precisó, «no se trata de cerrar el acuerdo y ya está, sino que es necesario realizar otras propuestas que mejoren el sistema».
La de Esquivias, Milagros del Barrio, también incidió en esta línea de mejorar los servicios en la provincia antes que mantener este acuerdo con la comunidad de Madrid. En este sentido, apostaba por la creación de un hospital que dé servicio a la zona Norte de Toledo, entendiendo que efectivamente la distancia con el de referencia, en la capital, es notable y peligrosa en según qué tipo de emergencias.
Por lo pronto, apostó por potenciar el Centro de Especialidades de Illescas, que está «parado», aunque, más a largo plazo, un hospital en la zona sería la mejor opción, siempre mejor que «tener que irse a otra comunidad y a otros centros que, encima, están privatizados», concluyó.