Buenas tardes, en primer lugar dar la bienvenida a todos los socios que se incorporan a este foro, espero que les sea de tanta utilidad como hasta ahora nos ha sido a los que lo habitamos con asiduidad. Anímense a participar e invitar a todo el que no lo sepa, por favor.
Para ninguno de los asistentes la Asamblea de ayer fue agradable, incluido para el ponente de la misma, ponente que no creo que sea, como decís en algún mensaje reciente, ni informal ni mucho menos un don nadie, no en Geseduma. Simplemente interpreta su papel, hace su trabajo, algunas veces, como anoche, más nervioso de la cuenta, nervios de los que este foro tiene parte de culpa y que, jugando a psicólogo barato y basado, dice, en su extensa experiencia, le hacen clasificar a los socios de las cooperativas en distintos grupos según lo que él interpreta.
Ésta, su interpretación, no es siempre tan acertada como su ego le hace pensar y, ni siquiera tiene la capacidad de reconocer sus errores ni, algo más evidente, dejar hablar, ya que ni como moderador, ni como ponente, ni siquiera en el cara a cara permite a los demás terminar sus exposiciones. Conozco a más aspirantes a psicólogos que hacen esto con facilidad.
Salvada queda en parte su "desagradable" actitud y prepotencia por sus compañeras, unas porque son extremadamente agradables y, además, escuchan y dejan hablar, otras, porque, aún no teniendo tanta capacidad de escuchar y dejar hablar, tienen que pedir disculpas en su nombre porque él no tiene esa capacidad,que le honraría. Ambas son asiduas lectoras de este foro, así que, en lo que les toca, mi agradecimiento personal por la atención recibida.
Hoy ya es otro día, así que hablemos del futuro: creo que debemos calmar los ánimos todos, porque independientemente del desacuerdo con los puntos que sea de la gestión de Geseduma, esta cooperativa es nuestra, le hace falta dinero, parece ser, y entiendo que, si no nos ponemos de acuerdo de manera civilizada, el tema se demorará más de lo que nos interesa, a nosotros y a Geseduma, que no olvidemos, tampoco disfruta con esta historia, aunque en gran medida sea responsable, que no culpable, de ella.
Debemos reunirnos, calmados, civilizados, intentando evitar que nadie nos altere en demasía como pudo ocurrir ayer, haciendo preguntas concretas, exigiendo respuesta concretas y, en cualquier caso, a pesar de que el ponente de turno, cuasi psicólogo y experimentado moderador, nos de muestras de su nerviosismo, mirarnos nuestro ombligo y decir, "vamos a solucionar el problema de nuestra cooperativa y a pillar nuestras casas", eso es lo que nos importa. Creo que, si hacemos eso, los nervios del más nervioso no nos lograrán sacar de nuestras casillas e incluso, si sabe aprender la lección, se nos dejará aportar soluciones.
Como aquí no hay forma de que me interrumpa, quisiera decir al ponente que reconsidere su postura y acuda con el mismo talante que propongo a la inminente próxima Asamblea.
Muchas gracias. Salud.